El ser humano hace buenas máquinas, que duran largo tiempo y solucionan diversas necesidades. Otras veces las hace mal, y dejan de funcionar. Entonces se parchean, se arreglan de cualquier modo, para que al menos «parezca» que todavía funcionan. Tirarlas puede avergonzar a su comprador, pues supone reconocer que ha «tirado» lamentablemente su dinero o su tiempo. <br/> El hombre también desarrolla…